viernes, 29 de diciembre de 2017

NAVIDAD- AÑO NUEVO 2017-2018


Oración Fin de Año
2017 -2018

Señor, Dios, dueño del tiempo y de la eternidad, tuyo es el hoy y el mañana, el pasado y el futuro. Al terminar este año quiero darte gracias por todo aquello que recibí de TI.

Gracias por la vida y el amor, por las flores, el aire y el sol, por la alegría y el dolor, por cuanto fue posible y por lo que no pudo ser.
Te ofrezco cuanto hice en este año, el trabajo que pude realizar y las cosas que pasaron por mis manos y lo que con ellas pude construir.

Te presento a las personas que a lo largo de estos meses amé, las amistades nuevas y los antiguos amores, los más cercanos a mí y los que estén más lejos, los que me dieron su mano y aquellos a los que pude ayudar, con los que compartí la vida, el trabajo, el dolor y la alegría.

Pero también, Señor hoy quiero pedirte perdón, perdón por el tiempo perdido, por la palabra inútil y el amor desperdiciado. Perdón por las obras vacías y por el trabajo mal hecho.

También por la oración que poco a poco fui aplazando y que hasta ahora vengo a presentarte. Por todos mis olvidos, descuidos y silencios
nuevamente te pido perdón.


 ¡Jesús, quédate con nosotros! 

En los próximos días iniciaremos un nuevo año y detengo mi vida ante el nuevo calendario aún sin estrenar y te presento estos días
que sólo TÚ sabes si llegaré a vivirlos.

Hoy te pido para mí y los míos la paz y la alegría, la fuerza y la prudencia, la claridad y la sabiduría.

Quiero vivir cada día con optimismo y bondad llevando a todas partes un corazón lleno de comprensión y paz.
Cierra Tú mis oídos a toda falsedad y mis labios a palabras mentirosas, egoístas, mordaces o hirientes.

Abre en cambio mi ser a todo lo que es bueno que mi espíritu se llene sólo de bendiciones y las derrame a mi paso.

Cólmame de bondad y de alegría para que, cuantos conviven conmigo o se acerquen a mí encuentren en mi vida un poquito de TI.

Danos un año feliz y enséñanos a repartir felicidad. Amén

¡FELIZ AÑO NUEVO!... 2018

lunes, 25 de diciembre de 2017

FELIZ NAVIDAD 2017



Que el nacimiento del niño Jesús llene nuestros corazones de PAZ, AMOR y FE en DIOS. ¡Felices Fiestas Navideñas!

jueves, 21 de diciembre de 2017

PREGÓN DE NAVIDAD



Pregón de Navidad, poema de Francisco Vaquerizo
Con vuestro permiso vengo,
amigos, a pregonar
el nacimiento, en Belén,
de un Infante que abrirá
los portones de la Gloria
a toda la humanidad.
Con vuestro permiso vengo,
amigos, a pregonar
suceso tan memorable,
evento tan singular
que hasta los coros angélicos
se encargaron de anunciar
diciendo “gloria en los cielos
y en la tierra, al hombre, paz”.
Y es que Jesús – Emmanuel”-
ha nacido en un Portal
y que Él es ya para siempre
nuestro Cordero pascual,
el que, inmolado en la Cruz
por toda la humanidad,
a la gracia de Dios Padre
de nuevo nos llevará.
Atención hacia este Niño,
porque no es un niño más,
es el Hijo de Dios vivo,
como pronto se verá
cuando salga a los caminos
y se ponga a predicar
ese Reino de los Cielos,
que es reino de caridad,
de amor, de vida, de gracia,
de justicia y de verdad.
Amigos, amigos todos,
acercaos y mirad
al Niño Jesús, que llora
siendo Él la felicidad
y la dicha por sí mismo.
Y otro detalle observad:
que apenas tiene pañales
ni cuna donde posar,
siendo Él la misma riqueza
y teniendo en propiedad
todas las cosas creadas
y los que estén por crear.
Tened en cuenta, asimismo
la tremenda soledad
en que se ve, pese a ser
la divina Majestad.
¿Por qué hace el Niño estas cosas?
Yo digo que las hará
porque viene a dar ejemplo
de pobreza y humildad,
virtudes que, de mayor,
tanto recomendará.
Y, sin embargo, parece
feliz que no cabe más;
su sonrisa de cariño,
su mirada de amistad
y la infinita ternura
de su rostro celestial,
clara y fehaciente muestra
de su contento nos dan.
Reyes magos de muy lejos
lo vinieron a adorar,
a sus plantas se postraron
con toda solemnidad
y, antes de volverse a casa,
dones le fueron a dar
de oro, de incienso y de mirra,
que son de mucho estimar.
Quiera Dios que, en estos días
alegres de Navidad,
no echemos en el olvido
algo tan elemental
como que el Divino Infante
es el punto principal
de estas fiestas; cualquier otro
que ocupase su lugar
-los regalos, los banquetes,
los adornos del hogar…-,
sería sacar de quicio
las cosas, deteriorar
sería la esencia misma
de la misma Navidad.
La Navidad es un Niño
que nace para librar
a los hombres del pecado,
y el que quiera de verdad
vivir estos días santos
con toda autenticidad,
ha de poner su mirada
y su amor en el Portal
donde Jesús Niño estrena
nuestra condición mortal.
Con vuestro permiso, amigos,
mi pregón llega al final,
no sin antes desearos
mucho amor y mucha paz
y unos días de descanso
y de gozo celestial.
Feliz Navidad os desea a todos. - Francisco.
Guadalajara, 2017.